El experto en Finanzas Mariano Otálora recomienda qué se puede hacer en el actual contexto y dónde no es recomendable poner nuestros ahorros
Pasan los días y lo único que vemos es un incremento de la desconfianza. El Gobierno viene acumulando muchos errores en su gestión que, en la medida que no reaccione, nos empujarán a una profundización de la crisis actual.
Analicemos primero el contexto (una especie de catarsis) para luego definir qué hacer y qué no hacer con nuestros ahorros.
La Argentina es un país muy complejo en donde tenemos un problema muy serio que la sociedad no logra visualizar en toda su magnitud.
Del lado de los políticos, piensan porque fueron elegidos y recibieron más votos que sus competidores, la sociedad los percibe como capaces para llevar adelante la vida de los argentinos. Nada está más lejos de esto. La calidad institucional en nuestro país es de una fragilidad preocupante, con el agravante de la incapacidad sistemática de gobernar que tienen nuestros políticos priorizando exclusivamente sus propios intereses.
Hace muchos años que los argentinos estamos a la deriva, que los políticos no hacen otra cosa que humillarnos como sociedad, disfrutando de vernos de rodillas, sometidos y callados; ya que nos pasamos nuestros días resolviendo los problemas que ellos mismos nos ocasionan.
La violencia política a la que somos sometidos en nuestro país, es la peor de todas, porque es gradual pero permanente y te quitan lo más sagrado que son las aspiraciones y los sueños. Nuestros políticos nos hacen vivir en un mundo equivocado, en donde ellos mantienen sus aspiraciones, ellos ganan y la sociedad pierde.
País más injusto que el nuestro, es difícil de encontrar.
Hace mucho tiempo que estamos a la deriva y si no hacemos un cambio de timón muy pronto, estaremos ingresando a una tormenta perfecta auto inducida por nuestros políticos.
Pero gracias a dios tenemos al dólar.
Pareciera que es el arma del pueblo de los que todavía no los pudieron poner de rodillas y se sostiene como pueden. El dólar es lo único que el Gobierno –aun con cepo mediante- no puede controlar.
Y cuando el dólar habla y se manifiesta con este nivel de brecha galopante, es un mensaje al corazón del poder que demuestra la falta de iniciativa y de diagnóstico adecuado.
El Gobierno está acorralado y no entienden los riesgos a los que nos están exponiendo a todos los argentinos. Las expectativas son negativas, la crisis de confianza es asombrosa y te lo demuestran todos los indicadores financieros.
Dónde invertir: te hablo con el corazón y con el bolsillo
Vamos al grano, así la simplificamos un poco. ¿Opciones para invertir en pesos?
En pesos se pueden hacer muchas cosas, por ejemplo: comprar bienes.
Invertir en bienes dolarizados (terrenos, departamentos, cocheras, construcción) pero pagando en pesos.
Los pesos no sirven para invertir. Sirven para endeudarse. En momentos en donde las presiones inflacionarias y cambiarias son tan fuertes, lo ideal es aprovechar el financiamiento en pesos.
Recuerden siempre, endeudarse en la moneda que se desvaloriza.
Plazo Fijo tradicional, UVA, Dólar linked ¿conviene?
Para responder a esta pregunta es importante tener en cuenta algunas cuestiones.
En principio: nadie debería invertir en pesos en estas circunstancias.
En los casos de familias que necesiten generar una renta en pesos mensual, están obligadas en caer en la renta fija en pesos porque las tasas que ofrecen los escasos productos en dólares son muy bajas.
Acá no tenemos que caer en la trampa: para invertir en pesos, hay que hacerlo con inteligencia. Buscar un mix, no enamorarse de las tasas ni de la renta.
¿Está claro? Salvo necesidad de obtener una renta, no invertiría en renta en pesos a mediano y largo plazo.
¿Pero en nada? Bueno, la única opción que elegiría sería la opción dólar linked (pero prefiero la cobertura con futuros) y en caso de producirse un salto en el tipo de cambio oficial, luego me posicionaría una parte de la cartera en indexados a la inflación.
La carrera dólar, tasa de interés e inflación, por ahora la viene ganando el dólar. En el algún momento las variables inflación y dólar jugarán un partido aparte, pero por ahora no es el momento.
Hay dos caminos, pareciera que la devaluación es inminente, pero no sabemos cómo ni cuándo. Mientras más se amplié la brecha, más inminente será la devaluación
¿Y qué hacemos con los pesos?
Para quienes no tengan la necesidad de la renta y tengan pesos, lo aconsejable es que vayan dolarizando su cartera.
A través del mundo de las criptomonedas y los stablecoins, por ejemplo, en donde los pesos los podemos pasar a dólares con un par de clicks, sin cepo; eso sí, pagando el valor del dólar en el mercado que es el Contado con liquidación.
Hay otras opciones, como los Cedears, que me encantan como opción, pero conllevan algunos riesgos de tipo de cambio y de la volatilidad propia de las cotizaciones de las acciones.
Perdón al Presidente y a todo su equipo, pero no voy a coincidir en que debemos ahorrar en pesos. Es el momento de que primero nuestros políticos nos presenten un plan creíble y profesional, para luego depositar la confianza en una moneda que no ha tenido la capacidad de brindar seguridad es mucho tiempo.
