martes, abril 23, 2024

El primer ministro Boris Johnson fue trasladado a la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital londinense de San Thomas, donde ingresó con “síntomas persistentes” de COVID-19.

“El estado del primer ministro empeoró a lo largo de la tarde y fue trasladado a la UCI del hospital por recomendación del equipo médico”, confirmó su oficina de Downing Street.

El jefe del Gobierno delegó poderes en el canciller Dominic Raab antes de entrar en la UCI, de acuerdo con su portavoz. El ministro de Exteriores y primer secretario de Estado admitió en una conferencia de prensa televisada que no había hablado con Johnson desde el sábado 4.

Ahora tendrá que actuar en nombre del primer ministro “donde sea necesario”, según los portavoces.

Johnson había indicado que estaba en buen estado de ánimo y al corriente de la evolución de la pandemia en un mensaje que envió por Twitter esta misma mañana.

“Estoy animado y me mantengo en contacto con mi equipo mientras trabajamos juntos en la lucha contra este virus y para mantener a todos a salvo”, escribió.

Downing Street no dio detalles de los motivos que llevaron a los médicos a trasladar a la UCI al mandatario conservador.

Johnson desveló en sus tuits que sigue con fiebre y una tos persistente.

El nuevo líder laborista, Keir Starmer, describió como “terriblemente triste” la noticia del empeoramiento del jefe del gobierno conservador.

El primer ministro estuvo diez días en confinamiento aislado en su apartamento de Downing Street, después de dar positivo en la prueba del SARS-CoV-2 el pasado 26 de marzo.

Fue ingresado el domingo 5 para hacerse nuevas pruebas como “precaución” ante los “síntomas persistentes” de COVID-19.

La pareja de Johnson, Carrie Symonds, que está embarazada, informó en su cuenta de Twitter que también ha sufrido síntomas del COVID-19.

“Pasé en cama la última semana con los síntomas principales del coronavirus. No necesité hacerme la prueba y después de descansar siete días me siento más fuerte y me estoy recuperando”, tuiteó la novia del primer ministro.

El ministro de Sanidad, Matt Hancock, y el médico jefe de Inglaterra y principal asesor del Gobierno en la pandemia, Chris Whitty, se han recuperado del COVID-19.

Ambos enfermaron casi al mismo tiempo que la baja del dirigente conservador.

Los últimos datos ministeriales apuntan a un total de 51.608 casos positivos de COVID-19, con un ascenso de 3.800 respecto al día anterior.

A su vez, el número de fallecidos en hospitales británicos a consecuencia de la enfermedad se elevó a 5.373 para las 16.00 horas GMT de este lunes 6, (con un aumento de 439 en las últimas 24 horas), de acuerdo con las mismas estadísticas.

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