El socialista anunció que deja su cargo para no sumarse a la abstención de su grupo parlamentario que permitió la investidura de Mariano Rajoy como presidente del Gobierno
El ex secretario general del Partido Socialista español Pedro Sánchez anunció este sábado que renuncia como diputado al Congreso para no sumarse esta tarde a la abstención de su grupo parlamentario que permitió la investidura como presidente de Mariano Rajoy, su rival en las últimas elecciones.
En medio de una gran expectativa, Sánchez, forzado a dimitir como líder socialista el pasado 1 de octubre por mantener su “No” a Rajoy, dijo que había tomado la decisión porque está “en profundo desacuerdo” con la decisión de facilitar la formación del gobierno conservador.
También explicó que entrega el acta de diputado para no desobedecer el mandato “abstencionista” que decidió hace una semana el órgano directivo del Partido Socialista (PSOE), llamado Comite Federal.
Sánchez, visiblemente emocionado, dijo que no va a dejar la política, que empezará “otra vez como militante de base” y que recorrerá España para “escuchar a los militantes” de cara a la celebración de un próximo congreso.
Desde la dimisión de Sánchez, el PSOE, primer partido de la oposición en España, está en manos de una comisión gestora que habrá de convocar ese congreso extraordinario “a partir del lunes que viene”, según su opinión.
El Congreso de los Diputados se reunió este sábado para, tras una breve intervención de los portavoces de todos los grupos, votar a favor de la investidura de Rajoy como presidente de un nuevo Gobierno, dado que el actual lleva más de diez meses en funciones.
En una Cámara de 350 escaños, Rajoy contó con 170 votos procedentes del PP (137 escaños), los liberales de Ciudadanos (32) y una diputada regionalista canaria.
Al mismo momento que se producía la sesión parlamentaria, miles de personas se manifestaron frente al Congreso para protestar por la investidura del líder conservador.
Con el lema “Ante el golpe de la mafia, democracia”, la manifestación fue secundada por unos 70 colectivos diversos y fue autorizada por la Delegación del Gobierno en Madrid.
