“Si nos negamos al llamado de la Justicia, esto es tierra de nadie”, dijo Michetti sobre la negativa de Hebe de Bonafini a declarar ante un juez por la causa Sueños Compartidos. “Es una situación insólita”, aseguró.
“Si nos negamos al llamado de la Justicia, esto es tierra de nadie. Si nos da lo mismo estamos en un problema importante”. Con estas palabras se expresó la vicepresidenta y titular del Senado, Gabriela Michetti, luego de que la titular de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, se negara a presentarse a declarar por la causa Sueños Compartidos y lograra esquivar a la Policía Federal que la fue a buscar con este objetivo.
“La verdad es que creo que estamos todos los ciudadanos asombrados y azorados. Es una situación insólita. No solo porque Bonafini ya nos tiene acostumbrados a estos eventos sino porque también hay numerosos dirigentes acompañándola”, expresó Michetti en referencia a los distintos diputados y exfuncionarios del kirchnerismo que se acercaron a la sede de Madres.
Además, Michetti afirmó que no tiene sentido decir que el Gobierno maneja a la Justicia porque es la que falló en contra del aumento de tarifas: “Hay una incongruencia e incoherencia absoluta porque es la misma Justicia la que nos traba algunas medidas gubernamentales”.
En cuanto a la Justicia, Michetti cree que su dispar funcionamiento habla de lo mal que funcionan las instituciones en el país: “La Argentina está atravesando hace rato una crisis institucional importante y nosotros hemos decidido avanzar a un futuro de instituciones más fuertes y transparentes, como lo hicimos con el INDEC que antes estaba deteriorado y no se podía depositar confianza. Hoy dice cosas que por ahí al Gobierno no le son tan favorables, pero es la verdad”, manifestó en una entrevista con el canal Todo Noticias.
Por último, la vicepresidenta se refirió a la polémica del aumento de tarifas y manifestó que fue la herencia más pesada que dejó el kirchnerismo: “El tema de la energía fue la bomba más grande que nos dejó el gobierno anterior. Este tema es trascendente para ordenar la macroeconomía. Por supuesto que hay que corregir los errores que cometimos, pero no podemos vivir ni crecer sin la energía”.
