Fue en la ONU, junto a otros países que habían avalado el tratado en la OEA. Alberto rechaza el envío de marines.
Argentina se sumó a un grupo de 16 países del continente que activaron el Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (Tiar) para Venezuela y habilitaron una intervención militar para derrocar a Nicolás Maduro.
La decisión fue tomada durante la asamblea de la Organización de Naciones Unidas (ONU) y en el artículo 5 de la resolución difundida por los cancilleres se cita el artículo 8 del TIAR, que contempla expresamente la posibilidad de apelar al uso de la fuerza.
Uno de los firmantes es Estados Unidos, que impulsó la aplicación del TIAR en Venezuela durante la última reunión de la OEA por pedido de Juan Guadió, presidente proclamado por la Asamblea y desconocido por Maduro, que sigue ocupando la primera magistratura en el palacio de Miraflores.
El TIAR es un tratado promovido por Estados Unidos en 1947 para proteger a los países del comunismo y el gobierno militar pidió aplicarlo para la guerra de Malvinas, pero no tuvo éxito.
Como explicó LPO, Perú abstuvo en la OEA porque el Tiar permite intervención militar y el presidente Martín Vizcarra considera que no es la salida para la crisis venezolana. Así se lo planteó a Alberto Fernández, cuando el viernes pasado lo recibió en su despacho.
Su posición descolocó a los países del continente que integran el grupo de Lima y promueven hace dos años acciones conjuntas para desbancar a Maduro del poder, en diálogo permanente con Washington.
El lunes en New York Vizcarra no se pronunció sobre el Tiar pero difundió un comunicado del grupo de Lima que en su artículo tres contempla sanciones económicas a Venezuela pero descarta el uso de la fuerza, una aclaración
Alberto comparte la postura de no enviar militares a Venezuela, compartida por México, Uruguay y Bolivia, pero minoritaria en el continente. La línea dura la promueven entre otros Estados Unidos, Brasil, Colombia y Chile, Argentina está alineada pero el canciller Jorge Faurie se esforzó ayer en aclarar que no considera conveniente un desembarco militar en Caracas.
“Hay todo un plano de medidas. Cuando se decide, se decide sobre una en particular que tiene que ver con las sanciones financieras para los integrantes del régimen. No dicen ‘excluyo las que están arriba, excluyo las que están abajo’. Solamente se decidió sobre ese plano”, explicó a la prensa en el consulado argentino en Nueva York, según informó La Nación.
