Ademas defendió la reprogramación de la deuda: “Es para defender la estabilidad cambiaria”.
Mauricio Macri ensayó este jueves un intento de brindar “tranquilidad” a 40 minutos de la apertura de los mercados. Aprovechó un acto en los talleres navales del astillero Tandanor para asegurar que está tomando las medidas necesarias para “reducir la incertidumbre”, aunque recordó que la estabilidad “no depende sólo de un gobierno”, en un mensaje a Alberto Fernández.
“Tenemos 59 días por delante hasta llegar a las elecciones: que transcurran de la mejor manera es mi responsabilidad como Presidente, pero sabemos muy bien que no depende solo de un gobierno”, aseguró después de insistir con un llamado al diálogo. También aprovechó para reiterar que la crisis se originó por culpa del resultado electoral de las PASO y opinó que “no son más que una encuesta, la más cara de todas, que generaron esta crisis, este clima de angustia”.
Macri aseguró que sus intenciones “no son egoístas” y por eso decidió no “patear temas para adelante”. Explicó que le pidió al ministro Hernán Lacunza que tome una serie de medidas para que “la crisis no haga sufrir más a los argentinos”.
“La decisión surge de haber escuchado a los propios y a la oposición”, aseguró y explicó: “Nos hicimos cargo del tema de la deuda para defender la estabilidad cambiaria en el corto, mediano y largo plazo, y vamos a trabajar sin especular, eso significa no patear los problemas para adelante”. “Estamos focalizados en lograr reducir el impacto de la inflación y la incertidumbre que afecta al bolsillo de los argentinos. El ministro planteó medidas para reducir este riesgo”.
Luego insistió con el llamado al diálogo: “Debemos aprender a pensar en el país en el largo plazo y colaborar para que haya tranquilidad democrática”. “Sé que no siempre es fácil, hay desconfianza, enojos, parece difícil crear consensos, pero cuanto más grande sea nuestra voluntad para lograr acuerdos, más calma y serenidad vamos a llevar a los argentinos”, afirmó.
