Ante la tribuna de industriales que lo escuchaban con atención, el presidente Mauricio Macri renovó sus críticas contra “la mafia de los juicios laborales”, y sumó también a las de “los puertos y las aduanas”, al tiempo que afirmó que al sector “les sacamos la pata de encima para que puedan crecer”.
En el marco de la celebración por el Día de la Industria, Macri sostuvo también que “durante muchos años nos dijeron que teníamos que vivir de lo nuestro, pero es todo al revés, la Argentina solo tiene futuro si nos integramos al mundo”.
“El mundo nos abrió una oportunidad y depende de nosotros aprovecharla”, agregó durante su participación de los festejos por el Día de la Industria, que organizó la Unión Industrial Argentina (UIA) en el Parque Industrial de Pilar.
“Los resultados ya se empiezan a sentir, llevamos tres meses de crecimiento”, señaló el mandatario, quien resaltó además que “estamos bajando la inflación”. Pidió “dejar de autoboicotearnos y autodestruirnos” y dijo que “hay que entender que nuestro crecimiento no se soluciona con devaluaciones o atajos”.
Asimismo, pidió a los empresarios que inviertan porque tienen “confianza” en el país, “porque creen en los argentinos” y no para hacerle “un favor” a él o al Gobierno, luego de asegurar que se está construyendo “un país confiable” en el que se enfrentan “las mafias, el narcotráfico y los juicios laborales”.
Previamente, la gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, aseguró que “lo peor quedó atrás”.
“Tenemos números en Provincia que lo demuestran y son datos que se están replicando en otros lugares de la Argentina. Las industrias sienten que el camino de obstáculos empieza a ser más fácil”, agregó. “Estas señales de esperanza llegaron para quedarse”, aseveró.
“Tenemos acciones de largo plazo, para ir creciendo no tan rápido pero sí de manera sostenida. Esa es la esencia del verdadero cambio”, enfatizó. “El camino es hacerlo juntos”, concluyó.
El Día de la Industria se celebra en la Argentina el 2 de septiembre en conmemoración de esa fecha de 1587, cuando zarpó del fondeadero del Riachuelo la carabela San Antonio al mando de Antonio Pereyra con rumbo al Brasil, lo que fue considerado como la primera exportación de la historia nacional.
